Y sí.
Ya era hora.
Porque vaya y pase que usted haya conocido muchas nuevas nacionalidades a partir de su establecimiento en tierras italianas. Pero lo que ni va ni pasa, es que no se haya preocupado por buscar en el diccionario, por preguntarle a alguien, el modo de decir aquella nacionalidad recién descubierta, en su lengua nativa. En español, se entiende.
Va la primera, entonces.
¿Vio usted que en italiano, a un habitante de Marruecos (y en general a todo aquel que sea moreno y hable una lengua que suene a árabe, pero no estamos aquí para estudiar los usos lingüístico-raciales de los italianos) se le llama MAROCCHINO?
Bueno. Pues la palabra equivalente en español es MARROQUÍ. Y es tanto femenina como masculina. Es decir, sea hombre o mujer, el habitante de Marruecos es MARROQUÍ. El correspondiente plural es MARROQUÍES. Y aplica lo mismo en femenino que en masculino.
En español, los habitantes de Marruecos no son MARROQUINOS.
Y ya para terminar y aunque confío en que se habrá ya dado cuenta, por pura precaución, se lo hago notar; que Marocco en español se dice Marruecos.